Diferencias entre Magdalenas, Muffins y Cupcakes

 

Aunque a simple vista puedan parecer similares, los cupcakes, magdalenas y muffins tienen diferencias clave en sus ingredientes, textura y preparación que los hacen únicos.

Más abajo te incluyo tres recetas fáciles de Magdalenas, Muffins y Cupcakes.

MAGDALENAS

Las magdalenas, también llamadas Madeleine,  son bizcochos de origen francés, conocidas por su ligereza y esponjosidad.

Tradicionalmente se elaboran con aceite (en lugar de mantequilla), huevos, azúcar, harina y levadura. A menudo se aromatizan con un toque de limón o canela. No suelen llevar ingredientes adicionales en la masa como frutas o chocolate.

Su textura es muy esponjosa y aireada, casi como un bizcocho ligero. Esto se debe a la forma en que se mezclan los ingredientes, que busca incorporar mucho aire a la masa. Suelen tener un copete característico en la parte superior.

La clave de las magdalenas reside en el batido. Se baten los huevos con el azúcar durante un tiempo prolongado hasta obtener una mezcla espumosa y blanquecina. Esto incorpora mucho aire, lo que las hace subir y obtener su textura esponjosa y su distintivo copete. La harina se añade al final y se mezcla suavemente. Se hornean a una temperatura relativamente alta para favorecer el copete. No suelen llevar decoración, a veces solo un poco de azúcar por encima.

Receta de Magdalenas Clásicas

Esta receta es para unas magdalenas sencillas y esponjosas, perfectas para el desayuno o la merienda.

INGREDIENTES

• 200 gramos de harina de trigo
• 150 gramos de azúcar
• 1 sobre de levadura química (aproximadamente 16 gramos)
• 3 huevos grandes
• 100 ml de leche
• 100 ml de aceite de girasol (o cualquier aceite vegetal suave)
• La ralladura de 1 limón (opcional, para un toque de sabor)
• Una pizca de sal

INSTRUCCIONES

1. Precalienta el horno a 180°C (350°F). Prepara un molde para magdalenas con capacillos de papel.
2. En un bol grande, tamiza la harina, el azúcar, la levadura y la pizca de sal. Si vas a usar la ralladura de limón, agrégala aquí.
3. En otro bol, bate los huevos, la leche y el aceite hasta que estén bien integrados.
4. Vierte la mezcla de líquidos sobre los ingredientes secos. Con una espátula o cuchara de madera, mezcla suavemente solo hasta que no queden grumos de harina. No mezcles en exceso, ya que esto puede hacer que las magdalenas queden duras.
5. Rellena cada capacillo hasta dos tercios de su capacidad. Hornea durante 20 minutos, o hasta que estén doradas y al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.
6. Deja enfriar en el molde durante unos minutos antes de transferirlas a una rejilla para que se enfríen por completo.

MUFFINS

Los muffins son de origen anglosajón y se caracterizan por una textura más densa y una versatilidad para incluir ingredientes.

A diferencia de las magdalenas, los muffins suelen llevar mantequilla (o grasa vegetal) en lugar de aceite. Comparten otros ingredientes básicos como harina, huevos, azúcar y levadura. Una de sus características distintivas es que se les añaden ingredientes adicionales como frutos secos, frutas (frescas o deshidratadas), chocolate, queso o incluso vegetales para versiones saladas. Son menos dulces que los cupcakes y las magdalenas.

La textura de los muffins es más densa, húmeda y compacta, similar a la de un pan rápido. No suelen tener el copete prominente de las magdalenas, sino que crecen más al ras del molde.

La preparación de los muffins sigue la "técnica del muffin", donde los ingredientes secos y húmedos se mezclan por separado y luego se combinan rápidamente, batiendo lo menos posible. El batido mínimo es crucial para evitar el desarrollo excesivo del gluten, lo que daría como resultado una textura gomosa en lugar de la deseada densidad. Se hornean a una temperatura media. Generalmente no se decoran, aunque pueden llevar trozos de ingredientes encima.

Receta de Muffins de Chispas de Chocolate

Estos muffins son suaves, húmedos y llenos de deliciosas chispas de chocolate, perfectos para el desayuno o como un tentempié.

INGREDIENTES

• 250 gramos de harina de trigo
• 100 gramos de azúcar
• 2 cucharaditas de levadura química
• 1/2 cucharadita de sal
• 1 huevo grande
• 240 ml de leche
• 80 ml de aceite vegetal (o mantequilla derretida)
• 1 cucharadita de extracto de vainilla
• 150 gramos de chispas de chocolate (o chocolate troceado)

INSTRUCCIONES

1. Precalienta el horno a 200°C (400°F). Prepara un molde para muffins con capacillos de papel.
2. En un bol grande, mezcla la harina, el azúcar, la levadura y la sal.
3. En otro bol, bate el huevo, la leche, el aceite y el extracto de vainilla hasta que estén bien combinados.
4. Vierte la mezcla de líquidos sobre los ingredientes secos. Con una espátula, mezcla solo hasta que los ingredientes secos estén húmedos. La masa debe quedar grumosa; no la mezcles en exceso. Incorpora las chispas de chocolate.
5. Rellena cada capacillo hasta dos tercios de su capacidad.
6. Hornea durante 22 minutos, o hasta que los muffins estén dorados y al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.
7. Deja enfriar en el molde durante unos minutos antes de transferirlos a una rejilla para que se enfríen por completo.

CUPCAKES

Los cupcakes, cuyo nombre significa "pastel de taza", son de origen estadounidense y se distinguen principalmente por su elaborada decoración.

Su masa es similar a la de un bizcocho, y se elaboran con mantequilla, azúcar, huevos, harina y levadura química. Son los más dulces de los tres, con una proporción de azúcar que a menudo supera la de la harina.

La textura de los cupcakes es más densa que la de las magdalenas, pero más ligera que la de los muffins, similar a la de un bizcocho tradicional. Suelen tener una parte superior plana o con un copete muy ligero, ideal para la decoración.

La preparación de los cupcakes implica batir la mantequilla con el azúcar hasta que la mezcla esté cremosa y blanquecina. Los huevos se incorporan uno a uno, y luego se añade la harina y la levadura.

Se hornean a una temperatura más baja que las magdalenas para evitar que suban demasiado y formen un copete pronunciado, ya que la idea es que queden con una superficie más plana para la decoración.

La característica principal de los cupcakes es su decoración, que puede incluir glaseados, cremas de mantequilla (buttercream), fondant, sprinkles y una infinidad de adornos.

Cupcakes de Vainilla con Glaseado de Mantequilla

Estos cupcakes son perfectos para cualquier celebración, con un glaseado suave y delicioso.

INGREDIENTES PARA LOS CUPCAKES

• 115 gramos de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
• 200 gramos de azúcar
• 2 huevos grandes
• 1 cucharadita de extracto de vainilla
• 200 gramos de harina de trigo
• 1 cucharadita y media de levadura química
• 1/4 cucharadita de sal
• 120 ml de leche

INGREDIENTES PARA EL GLASEADO DE MANTEQUILLA (BUTTERCREAM)

• 115 gramos de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
• 250 gramos de azúcar glas (azúcar impalpable)
• 1-2 cucharadas de leche (o crema de leche)
• 1/2 cucharadita de extracto de vainilla

INSTRUCCIONES

Para los Cupcakes

1. Precalienta el horno a 175°C (350°F). Prepara un molde para cupcakes con capacillos de papel.
2. En un bol grande, bate la mantequilla y el azúcar con una batidora eléctrica hasta que la mezcla esté cremosa y de color claro (unos 3-5 minutos).
3. Incorpora los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición. Agrega el extracto de vainilla y bate.
4. En un bol aparte, tamiza la harina, la levadura y la sal. Añade los ingredientes secos a la mezcla de mantequilla en tres adiciones, alternando con la leche en dos adiciones, comenzando y terminando con los secos. Bate solo hasta que se combinen.
5. Rellena cada capacillo hasta dos tercios de su capacidad. Hornea durante 20-22 minutos, o hasta que un palillo insertado en el centro salga limpio.
6. Deja enfriar los cupcakes en el molde durante unos minutos antes de transferirlos a una rejilla para que se enfríen por completo antes de glasearlos.

Para el Glaseado de Mantequilla

1. En un bol, bate la mantequilla a temperatura ambiente con una batidora eléctrica hasta que esté suave y cremosa.
2. Gradualmente, añade el azúcar glas tamizado, batiendo a baja velocidad hasta que se integre. Una vez que esté incorporado, sube la velocidad y bate hasta que la mezcla esté esponjosa.
3. Incorpora el extracto de vainilla y una cucharada de leche. Bate hasta obtener la consistencia deseada. Si es necesario, añade la segunda cucharada de leche para ajustar.
4. Una vez que los cupcakes estén completamente fríos, decóralos con el glaseado usando una espátula o una manga pastelera.

En resumen, mientras que la magdalena es un dulce sencillo, esponjoso y con copete, el muffin es más denso y versátil con inclusiones en la masa, y el cupcake es esencialmente un mini bizcocho diseñado para ser decorado de forma elaborada.